3 de agosto de 2007

Renascimento



En mayo de 1453 cae Constantinopla en manos de Mohamed el Conquistador. En Borgoña la corte de Felipe el Bueno y la Orden del Toisón de Oro se conmosionaron profundamente. El gran duque de occidente quiso lanzar una cruzada para recuperar la ciudad. Y lo hizo con un gesto petulante e inútil pero muy significativo de la psicología de la época, del suntuosismo de su corte. Incitó a sus paladines para que arriesgasen su vida ante la Cruz amenazada. Y esto se hizo en unas fiestas celebradas el Lille el 17 de junio de 1454 que la posteridad ha conocido como el "Voto del Faisán".
Tal voto respondía a unos antiguos usos y costumbres caballerescos. Como los caballeros se comprometían a una heróica hazaña, a unos trabajos esforzados, solían prestar juramento sobre un ave reputada como noble, como por ejemplo la garza, el pavo real, el cisne o el faisán. En el transcurso de un festín el animal era servido asado pero cubierto con su pellejo y sus plumas ya que los cocineros eran maestros en el arte de despellejar y volver a revestir a las aves.


Jan Kubelik plays "Zephyr" by Hubay