1.4.
Cascabel.
El
Cascabel es un giro de ritmo semicontinuo,
timbre o sonoridad metálica
y texto fonético limitado
compuesto por las consonantes "L"
y "N" y la vocal "I"
(ej.: linlinlinlin... ). Se trata
al igual que el timbre de agua,
de un timbre especializado, si bien
en el caso del cascabel, la personalidad
propia como giro se la otorga su
sonoridad metálica
- acampanillada, que hace que el
sonido de esta variación
nos recuerde al del instrumento
del que, precisamente, toma el nombre
o al de una pequeña campanilla.
La especial sonoridad acampanillada
la otorga la consonante final "N".
VALOR
POSITIVO: Hasta 9 Puntos.
Los
Floreos son giros de ritmo semicontinuo,
de timbre o sonoridad, principalmente,
metálica o hueca y texto
fonético ilimitado; es decir
en los floreos pueden intervenir
todas las consonantes y vocales.
El concepto de floreos, en cierta
medida, es residual; ya que podemos
calificar como tales a todas aquellas
variaciones que no tengan ubicación
sistemática en el resto de
epígrafes del Código.
Esto hizo, que en su día,
la casilla de la planilla de enjuiciamiento
donde se recogen los floreos fuera
el cajón de sastre donde
tenían cabida muchos giros
que en la actualidad tienen su propio
lugar en el código y en la
planilla, pero que en le pasado,
debido a las limitaciones de los
primeros Códigos de Canto,
no lo tenían. Se puede decir,
sin exagerar, que la gama de floreos
que puede emitir el canario de Canto
Timbrado Español es ilimitada.
VALOR
POSITIVO: Hasta 27 Puntos.
Sirvan
para este epígrafe los conceptos
apuntados para el anterior, ya que
la única diferencia que existe
entre ambos estriba, fundamentalmente,
en el ritmo de emisión; que
en el caso de los floreos lentos
tendrá que ser discontinuo.
Los floreos lentos constituyen la
parte más bella y musical
del canto de nuestro canario, hasta
el punto de poder afirmar que se
trata de la variación reina
del canario de Canto Timbrado Español.
VALOR
POSITIVO: Hasta 27 Puntos.
La
Campana es un giro de ritmo discontinuo,
timbre o sonoridad metálica
(sonido del instrumento campana)
y texto fonético relativamente
limitado por la terminación
en "N", "NK"
o "NG". La consonante
final "N" es la que confiere
la sonoridad acampanada a este giro.
Consideramos más adecuado
potenciar la terminación
"NK", en lugar de "NG",
ya que la campana, por sus especiales
características sonoras,
es uno de los giros del canto de
nuestro canario que más probabilidades
tiene de acusar gangosidad o nasalidad
y estas aumentan con la presencia
de la consonante "G".
VALOR
POSITIVO: Hasta 9 Puntos.
Los
Cloqueos son giros que pueden ser
emitidos tanto con ritmo discontinuo
como semicontinuo, siendo los de
ritmo discontinuo los que más
se asemejan al característico
sonido de la gallina del que toman
prestado el nombre y, por tanto,
los más meritorios. Tienen
timbre o sonoridad hueca y texto
fonético limitado por la
intervención de las consonantes
"C", "L" y "K"
y las vocales "O" y "U"
(ej.: clo clo clo; clok clok clok..).
VALOR
POSITIVO: Hasta 18 Puntos.
Las
Castañuelas son un giro de
ritmo semicontinuo, timbre o sonoridad
hueca y texto fonético limitado
compuesto por las consonantes "C",
"L", y "K",
nunca "CH", y la vocal
"A" (ej.: clakclakclak...).
La estructura de esta variación
coincide con la de los cloqueos,
si bien las castañuelas se
emiten con ritmo semicontinuo, de
cadencia, por lo general, más
rápida que los cloqueos y
en su texto fonético interviene
la vocal "A" en
lugar de la "O" o la "U".
Como en el caso de otros giros que
toman el nombre por la semejanza
de su sonido con el de algún
instrumento musical, el sonido de
las castañuelas debe hacernos
rememorar el del típico y
tradicional instrumento del folclore
español.
Las
Variación conjunta es la
percepción simultanea de
dos o más giros cualesquiera
de los definidos en el repertorio
del Canario de Canto Timbrado Español.
Las
variaciones conjuntas se podrán
puntuar en todos los giros que la
compongan, dejando al buen criterio
del juez el no sobrevalorar en los
distintos apartados.
VALOR
POSITIVO: Hasta 27 Puntos.
El
agua lenta es un giro de ritmo discontinuo,
timbre o sonoridad acuosa y texto
fonético limitado por la
presencia de las consonantes
"B", "G", "L"
y "W", así como
posible "D" final, y las
vocales "A", "I",
"O" y "U". El
mejor ejemplo posible es un grifo
que gotea sobre un cubo medio lleno.
Si en todos los giros es precisa
una buena dicción, en el
caso de las variaciones de sonoridad
acuosa esta exigencia alcanza su
mayor expresión, ya que si
las consonantes que intervienen
en este tipo de giros no son emitidas
de una forma nítida y pura
se produce un sonido emborronado
que hace perder al canto gran parte
de belleza y musicalidad.
VALOR
POSITIVO: Hasta 18 Puntos.
El
agua semiligada es un giro de ritmo
semicontinuo, timbre o sonoridad
acuosa y texto fonético limitado
por la presencia de las consonantes
"B", "G", "L"
y "W", así como
posible "D" final, y las
vocales "A", "O"
y "U". Las únicas
diferencias con el agua lenta estriban
en el ritmo de emisión y
en que no admitiremos la presencia
de la vocal "I", puesto
que, dado el ritmo de emisión
semicontinuo del agua semiligada,
nos hallaríamos ante un timbre
de agua.
VALOR
POSITIVO: Hasta 9 Puntos.