La radiación llegó a Huelva 15 días después del accidente de Fukushima
Investigación de la universidad de huelva Departamento de Física AplicadaCientíficos de la UHU constatan que la mayor parte de elementos radiactivos que entraron en Europa lo hicieron por el Suroeste de la Península ·
El trabajo subraya que los niveles no fueron un riesgo para la salud
La Universidad de Huelva (UHU), a través de su Departamento de Física Aplicada, ha realizado un estudio en el que detecta la presencia en la provincia, de la nube radiactiva originada tras el accidente de la central nuclear de Fukushima (Japón). Los científicos de la UHU han evidenciado que los elementos radiactivos (radionucleidos) tardaron en alcanzar la costa onubense 15 días después de que la central empezara a emitir ese material radiactivo tras el tsunami que sacudió parte de Japón el pasado 11 de marzo.
El estudio ha sido publicado en la prestigiosa revista Environmental International y no solo da constancia de la llegada de ese material sino que dibuja el camino que los elementos procedentes de la costa oriental de Japón siguieron hasta alcanzar el Golfo de Cádiz, el punto más importante de llegada a Europa de la nube con elementos radiactivos.
El estudio ha sido realizado entre otros, por el catedrático de Física Aplicada, Juan Pedro Bolívar y otros integrantes de dicho departamento y de instituciones colaboradoras: Rafael Lozano, Enrique Gutiérrez de San Miguel, José Antonio Adame, Mar Sorribas, Melquíades Casas-Ruiz y Miguel Ángel Hernández-Ceballos.
Una primera aproximación que Juan Pedro Bolívar quiso resaltar es que "el impacto medido de la nube que llegó de Fukushima no ha tenido importancia desde el punto de vista de la salud, ya que las dosis radiológicas recibidas por ese episodio han sido totalmente despreciables en relación al fondo natural de Huelva".
El estudio arrancó tras las mediciones efectuadas: "Tenemos en Huelva y provincia una red de control radiológico atmosférico que consta de tres estaciones más una situada en el Campus de Puerto Real de la Universidad de Cádiz)".
El estudio ha sido publicado en la prestigiosa revista Environmental International y no solo da constancia de la llegada de ese material sino que dibuja el camino que los elementos procedentes de la costa oriental de Japón siguieron hasta alcanzar el Golfo de Cádiz, el punto más importante de llegada a Europa de la nube con elementos radiactivos.
El estudio ha sido realizado entre otros, por el catedrático de Física Aplicada, Juan Pedro Bolívar y otros integrantes de dicho departamento y de instituciones colaboradoras: Rafael Lozano, Enrique Gutiérrez de San Miguel, José Antonio Adame, Mar Sorribas, Melquíades Casas-Ruiz y Miguel Ángel Hernández-Ceballos.
Una primera aproximación que Juan Pedro Bolívar quiso resaltar es que "el impacto medido de la nube que llegó de Fukushima no ha tenido importancia desde el punto de vista de la salud, ya que las dosis radiológicas recibidas por ese episodio han sido totalmente despreciables en relación al fondo natural de Huelva".
El estudio arrancó tras las mediciones efectuadas: "Tenemos en Huelva y provincia una red de control radiológico atmosférico que consta de tres estaciones más una situada en el Campus de Puerto Real de la Universidad de Cádiz)".
"A finales de marzo -añade Juan Pedro Bolívar- los filtros que recogemos semanalmente plasmaban unos incrementos bruscos (picos) de radiactividad, es decir, de concentraciones de ciertos radionucleidos como el Cesio (Cs)137 o el Yodo (I)131 que nunca antes habían sido detectados en nuestras estaciones y que sí habían sido emitidos por los reactores nucleares de Fukushima unos días después del tsunami del 11 de marzo". El estudio realizado a raíz del escape de Fukushima y su repercusión a nivel mundial, es el único de los llevados a cabo en España. A nivel europeo hay solo dos más.
Los niveles detectados en Huelva -que tuvieron su momento culminante el día 27 de marzo- fueron también percibidos en Portugal, Cáceres y otros lugares del país. La nube o pluma cargada de radiación tenía dos ramas principales. La primera entró por la costa portuguesa suroccidental y penetró a España por Huelva y de ahí a Sevilla. Ésta ha sido la ramificación más importante, ya que la otra se adentró en el continente por la costa francesa.
Sin embargo, el trabajo de la UHU no se ha limitado a dejar constancia de la llegada de los radionucleidos. La segunda parte del estudio ha consistido en trazar el recorrido que la radiación siguió desde la central nuclear nipona hasta el Golfo de Cádiz. El catedrático de Física Aplicada de la UHU explica que para "reproducir el recorrido de la nube hemos utilizado las técnicas denominadas retrotrayectorias". El método consiste en, dados una fecha y lugar concretos, trazar el recorrido que ha hecho una masa de aire en particular durante los días que se consideren necesarios o dignos de estudio.
Los niveles detectados en Huelva -que tuvieron su momento culminante el día 27 de marzo- fueron también percibidos en Portugal, Cáceres y otros lugares del país. La nube o pluma cargada de radiación tenía dos ramas principales. La primera entró por la costa portuguesa suroccidental y penetró a España por Huelva y de ahí a Sevilla. Ésta ha sido la ramificación más importante, ya que la otra se adentró en el continente por la costa francesa.
Sin embargo, el trabajo de la UHU no se ha limitado a dejar constancia de la llegada de los radionucleidos. La segunda parte del estudio ha consistido en trazar el recorrido que la radiación siguió desde la central nuclear nipona hasta el Golfo de Cádiz. El catedrático de Física Aplicada de la UHU explica que para "reproducir el recorrido de la nube hemos utilizado las técnicas denominadas retrotrayectorias". El método consiste en, dados una fecha y lugar concretos, trazar el recorrido que ha hecho una masa de aire en particular durante los días que se consideren necesarios o dignos de estudio.
Así, la UHU ha definido el itinerario y la orientación del 'viaje' de la nube o pluma radiactiva que miró hacia el Oeste, con lo que recorrió el Pacífico, los Estados Unidos y el Atlántico. Bolívar aclaró que "no ha habido otras nubes que hayan llegado a Europa desde otra orientación y que "las corrientes de aire suelen tener siempre la trayectoria Este-Oeste".
Según queda fielmente reflejado en el gráfico de la página anterior, la retrotrayectoria permite marcar de manera diaria el trayecto de los elementos radiactivos desde que salieran de las unidades dañadas de Fukushima hasta su llegada a España.
Según queda fielmente reflejado en el gráfico de la página anterior, la retrotrayectoria permite marcar de manera diaria el trayecto de los elementos radiactivos desde que salieran de las unidades dañadas de Fukushima hasta su llegada a España.
En este sentido, el trabajo explica que "La circulación de la masa de aire durante esta época del año hizo posible que los radionucleidos alcanzaran la Península Ibérica y como consecuencia de ello, se pudo confirmar el origen de esa concentración que se detectó en la ciudad de Huelva".
Aun más, el seguimiento realizado en el período estudiado confirma también que la masa de aire llegada de la costa oriental de EEUU procedía a su vez, del interior del país y más aún del Oeste.
Los períodos que se estudiaron fueron de 8 días, intervalo que se considera idóneo para constatar la dirección de los vientos y teniendo en cuenta las mediciones en este sentido efectuadas en Washington D.C.
